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jueves, 20 de octubre de 2011

Los basurales a cielo abierto

Las municipalidades de Famaillá, Monteros y Concepción, entre las más grandes del interior, arrojan los desechos que producen sus habitantes en predios que son vaciaderos a cielo abierto. 

Una veintena de familias pululan entre las 24 toneladas de desperdicios que descargan los camiones del municipio por día. Escarban para buscar elementos que puedan vender (botellas, metales, cartones, vidrio y papel) o rescatar (ropa, calzado, muebles rotos y cajones, entre otros).Cinco columnas de humo grisáceo pueden verse desde la ruta 38. Con el olor, son los dos indicativos del sitio en el que el municipio de Famaillá, a 35 kilómetros de la capital, deposita los residuos que generan sus más de 30.000 habitantes.


El basurero municipal no dista demasiado de uno clandestino: no hay cercas perimetrales, carteles que prohíban el paso ni maquinarias trabajando . Pero las principales irregularidades que se observan a simple vista son la quema de basura, el ingreso de vehículos particulares para tirar basura y la mezcla de residuos orgánicos con inorgánicos.




El basural de Monteros está a varios kilómetros de la ciudad y recibe por día alrededor de 18 toneladas de desperdicios que arrojan sus 28.000 vecinos.
En Concepción, el basural está en cercanías del río Gastona. El terreno, alquilado a una familia de lugareños, recibe ocho descargas diarias de los camiones recolectores (llevan la basura de 50.000 vecinos) y algunos residuos extra que recoge la Municipalidad como escombros o ramas.



1 comentario:

  1. Buenas tardes, soy docente, estoy realizando un proyecto de biosustentabilidad. Podría utilizar información de tu página sobre los basurales a cielo abierto en nuestra ciudad por favor?

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